Los homicidios que nadie ve

Por: Víctor Manuel Sánchez Valdés (@victorsanval)

Cuando se habla de lugares inseguros en México, la mayoría pensamos en los municipios en donde se registra la mayor cantidad de homicidios dolosos, como Acapulco, Tijuana, Culiacán, Ciudad Juárez o Chihuahua. Sin embargo, hay municipios de menor tamaño que tienen tasas de homicidios per cápita[1] que superan dos, tres, cuatro o hasta cinco veces las de los cinco municipios ya citados.

Se trata de municipios que no están en el radar de las autoridades, ni de los medios de comunicación, por tanto, sus crisis de seguridad han sido desatendidas. Tampoco suelen recibir apoyos federales a pesar de que sus corporaciones de policía tienen pocos elementos y equipo insuficiente. Por ejemplo, la mayor parte de los mismos no han accedido en los últimos años a recursos[2] de SUBSEMUN[3] o FORTASEG[4], a pesar de que es precisamente en esos municipios donde más se requiere el apoyo.

Esto quiere decir que cuando medimos los homicidios en términos relativos, Guadalupe y Calvo tiene un problema de asesinatos casi cinco veces más grande que los dos principales municipios de Chihuahua.

Otro caso paradigmático es el municipio de Concordia en Sinaloa, que con una población de poco más de 30 mil habitantes, ha tenido 25 asesinatos dolosos en 2017 y cuenta con una tasa de 82.07 homicidios por cada 100 mil habitantes, la cual supera por más del doble a la que registra Culiacán, que cuenta con 35.15 homicidios por cada 100 mil habitantes.

A continuación, se muestra una tabla en donde se incluyen los 15 municipios del país con más homicidios por cada 100 mil habitantes[5]:

Municipio Entidad Homicidios por 100 mil habitantes
Guadalupe y Calvo Chihuahua 97.55
Madera Chihuahua 85.99
Tecomán Colima 85.53
Tlacotalpan Veracruz 83.33
Concordia Sinaloa 82.07
Armería Colima 78.18
San Carlos Tamaulipas 73
Navolato Sinaloa 71.19
Chilapa de Álvarez Guerrero 67.72
Batopilas Chihuahua 63.87
Aguililla Michoacán 61.79
Coyuca de Benítez Guerrero 61.31
Trancoso Zacatecas 61.05
Múgica Michoacán 56.27
Tamazula Durango 54.41

El elemento común que se repite en todos estos municipios es la confrontación directa entre dos o más organizaciones criminales. Por ejemplo, en Aguililla y Múgica en Michoacán existe una disputa abierta por el control de la zona entre el Cártel Jalisco Nueva Generación, los Viagras y los remanentes de los Caballeros Templarios, o bien, en Madera, Chihuahua, su territorio es disputado desde hace años por el Cártel de Sinaloa y el Cártel de Juárez.

Es importante que los gobiernos atiendan lo que pasa en estos municipios a la brevedad, porque en algunos casos se está cocinando una bomba de tiempo a punto de estallar. El país no puede soportar un nuevo San Fernando, Allende o Ayotzinapa, cuyas realidades se asemejan mucho a las que se viven en los 15 municipios que fueron mencionados en el presente artículo.

Si analizamos las peores tragedias en materia de seguridad pública que hemos tenido en el país, la mayoría comparten una característica, se presentaron en municipios poco poblados, pero con altos índices de inseguridad, que no recibieron la atención debida por parte de las autoridades.

Por tal motivo, creo que es importante que desde el gobierno federal se piense para 2018 en un programa emergente de apoyo a los municipios pequeños con altos índices de inseguridad, que incluya equipamiento para las policías locales, apoyos para la contratación de más personal, despliegue de fuerzas federales y mayor capacitación para los policías.

 

*  Víctor Manuel Sánchez Valdés es colaborador de Causa en Común, profesor investigador de la Universidad Autónoma de Coahuila, doctor en políticas públicas por el CIDE y especialista en temas de seguridad pública. Correo de contacto: victorsanval@gmail.com

 

Nota: no se incluyeron en el análisis otros municipios como San Martín Totoltepec, Puebla o Magurichi, Chihuahua, que tuvieron respectivamente 162.6 y 154.47 homicidios por cada 100,000 habitantes, debido a que la cantidad de homicidios fue muy baja (menor a 5) y en dicho escenario no se puede descartar que tales homicidios hayan sido hechos aislados y no una tendencia sostenida.

[1] Las tasas de homicidios por cada 100,000 habitantes se calcularon utilizando las cifras de homicidios dolosos que publicó el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública de enero a junio de 2017, para todos los municipios y para la estimación de la población se utilizaron los datos del CONAPO.

[2] Es importante mencionar que tanto el SUBSEMUN, como el FORTASEG, tienen una serie de criterios de elegibilidad para los municipios, en donde se toman en cuenta aspectos como la población total del municipio, el estado de fuerza del mismo, las tasas delictivas y su capacidad de disminuirlas, así como las características del municipio (por ejemplo, si es fronterizo o un destino turístico). Además, se restringe la cantidad de municipios beneficiados a 300. Por tal motivo, se dificulta el acceso de muchos de los municipios citados en el presente artículo, debido a que tienen una población muy pequeña y no se encuentran en corredores turísticos o fronterizos.

[3] Subsidio para la seguridad en los municipios.

[4] Programa de fortalecimiento para la seguridad.

[5] A manera de comparación los municipios con más asesinatos en números absolutos tienen las siguientes tasas de homicidios por cada 100 mil habitantes: Tijuana, Baja California, con 41.09; Acapulco, Guerrero, con 48.66; Culiacán, Sinaloa, con 35.15; Ciudad Juárez, Chihuahua, con 21.18 y Chihuahua, Chihuahua, con 20.29.